El Arte de Amar a Tres. Yo, Tu y Nosotros: Teoría y Práctica para las Relaciones a Dos
Reseña del libro "El Arte de Amar a Tres. Yo, Tu y Nosotros: Teoría y Práctica para las Relaciones a Dos"
Esta obra refleja la experiencia clínica y humana de la autora, por un lado como psicóloga Clínica y Psícoterapeuta Somática Individual y de Pareja a la vez que describe su experiencia como Mujer. El libro se divide en dos partes. La primera, en formato de novela, acompaña el transcurso de las sesiones psicoterapéuticas de varias parejas, de sus quejas, sus demandas y su sufrimiento, así como su recorrido y evolución, incluyendo el de la propia psicoterapeuta, Laura. La segunda es más clínica; con ideas, pensamientos, herramientas, ejercicios y figuras importantes que podrán ser muy útiles para el Psicoterapeuta, Psicólogo, Médico, Educador y Estudiante de estas áreas, así como para cualquier profesional del área de la Intervención Social. Es sobre todo un libro cuyo objetivo aspira a expandir la conciencia, identificando los "autoengaños y trampas" que dificultan el equilibrio entre estar "juntos" y "separados", así como el que se establece entre "dar" y "recibir" Amor con Alma, Corazón y Simplicidad. "Vivir es simple, lo difícil es ser simple". Se buscó elegir un lenguaje menos clínico y más accesible al público, para poder transmitir mejor el mensaje, facilitando la lectura a todos los que no están relacionados con este área Ser psicoterapeuta, principalmente psicoterapeuta corporal, implica una gran exigencia. El psicoterapeuta corporal tiene que estar continuamente observándose, dado que su cuerpo es también un instrumento de trabajo que aporta mucha información sobre lo que está aconteciendo y sobre la manera de cómo se deja afectar con lo que pasa en el gabinete, con respecto al cliente. El psicoterapeuta tiene que saber moverse, tocar, colocar, entrar en resonancia, distinguir lo que es suyo y podría llegar a "contaminar" y lo que es del cliente. Tiene que saber cuidar su tono de voz, sus gestos y su aspecto. Todo puede afectar al otro. Es un cuadro muy diferente del que conoció Laura cuando era sólo psicóloga clínica. Cuando más avanza en su recorrido profesional, más se da cuenta de que el aprendizaje no tiene fin y la evolución tendrá que ser constante.
